Tras un primer encuentro la semana pasada en Villavicencio (Meta), alrededor de 400 personas de Antioquia, Norte de Santander, Santander, Arauca, Boyacá, Bolívar y Cesar e invitados del Magdalena Medio participarán en este espacio, en el que serán elaboradas propuestas para remitirlas a las partes en diálogos.
La necesidad de verdad, justicia, reparación pero sobre todo tratar de lograr la paz con un país reconciliado, han marcado los debates de representantes de organizaciones de derechos humanos y afectados directos del conflicto.
Al igual que regiones como Apartadó en el Urabá antioqueño, Barrancabermeja ha sido una de las ciudades colombianas más golpeadas por el conflicto. Aún permanece en la memoria de los habitantes de este municipio la masacre registrada en 1998, cuando los paramilitares mataron a siete personas y desaparecieron a otras 25.
De acuerdo con la agenda, durante dos días los delegados trabajarán en mesas paralelas que versarán en temas como la violencia sociopolítica, perspectiva de género, los jóvenes en el conflicto y la búsqueda de la paz y modelo de desarrollo económico.
Auspiciado por Naciones Unidas en Colombia y el Centro de Pensamiento y Seguimiento al Proceso de Paz de la Universidad Nacional, las propuestas colectivas de las víctimas se harán llegar a la mesa de paz, con sede en La Habana, Cuba, desde hace 20 meses, para enriquecer este tema, el cuarto de cinco puntos de la agenda.
En el primero de los tres foros regionales programados participaron 500 personas, 40 de ellas jóvenes de entre 13 y 24 años y el 46 por ciento mujeres, quienes coincidieron en la necesidad de crear comisiones de la verdad.
La próxima cita se realizará el 17 y 18 de julio en Barranquilla, Atlántico, mientras que el encuentro nacional, el 5 y 6 de agosto, tendrá como sede a la sureña ciudad de Cali (Valle del Cauca), con la asistencia de más de mil 200 delegados.
Desde que comenzaron los diálogos en noviembre de 2012 el gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) han suscrito acuerdos parciales en tres puntos: desarrollo agrario, participación política y solución al problema de las drogas ilícitas.
El 15 de julio venidero comenzarán a abordar de forma paralela los dos temas restantes, las víctimas y la terminación del conflicto en sí.
tgj/may
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