Barómetro Internacional
El fracaso del modelo neoliberal crea una nueva crisis mundial
La
realidad mundial del siglo XXI esta signada por una grave crisis del
sistema capitalista, la incapacidad del modelo neoliberal para crear
una respuesta de desarrollo a nivel global, así como para lograr una
salida a la crisis de los países desarrollados, amplían los efectos de
una grave recesión económica. Esta realidad pone al descubierto los
graves síntomas de un modelo en decadencia. Esta nueva realidad muestra
que las denominadas crisis cíclicas, como fueron las de 1929 y de la
década del 40, mostraron el avance del capitalismo monopólico que en
base a dos guerras mundiales permitió el crecimiento de EEUU, como
primera potencia global. Sólo frenaba sus ambiciones la existencia de
la URSS, transformada en una importante potencia económica luego de la
derrota del fascismo en 1945, pero los graves errores del modelo
socialista soviético, especialmente por la burocracia y el control del
estado, sucumbió en 1989–90, para dejar la manos libres a los militares
y empresarios de EEUU.
Una
de las características de la fase monopólica de este modelo
imperialista, ha sido la fusión del capital industrial con el
Financiero, lo que generó una mayor concentración de capitales, creando
una nueva oligarquía en los centros de poder de EEUU, con el efecto de
la desaceleración de la industria a finales del siglo XX, el incremento
el capital de los bancos y la financieras, las cuales forjaron el
modelo especulativo del mercado, produciendo las denominadas burbujas,
o sea inversiones con alto riesgo sin ningún respaldo real de capital.
Este fenómeno especulativo, se transformó en una crisis permanente del
capitalismo de EEUU, afectando de manera directa a Europa, lo que
obligó a varias naciones europeas a caer en los ajustes macroeconómicos
aplicados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), bajo la anuencia
y control de Alemania.
El fracaso del modelo neoliberal crea una nueva crisis mundial
La
necesidad de EEUU y sus socios de la OTAN de lograr el control total
del mercado mundial a través de las grandes multinacionales, creó el
fetiche de que se lograrían grandes ganancias con el libre mercado como
modelo de intercambio mundial. Este fetiche fue desmentido por su
propio fracaso, ya que su propuesta ha derivado en grandes ajustes y
deudas sociales, afectando de gran manera el ecosistema mundial, con
efectos irreparables sobre la capa de ozono o los casquetes polares,
creando la incertidumbre de la sobrevivencia de la propia especie
humana.
Ante esa realidad han surgido nuevas
iniciativas, para intentar salvar el capital, tratando de rescatar el
modelo de la “Tercera Vía”, en un intento de recuperar el “capitalismo
con rostro humano”. En un trabajo nuestro anterior nos preguntábamos,
¿Hay un capitalismo “con rostro humano”?, ¿Existió en los gobiernos de
Bill Clinton, Tony Blair, Felipe González -defensores de esta postura-
sus gobiernos en alguna oportunidad, se defendieron a los ciudadanos,
tanto en derechos humanos como en seguridad social?. A lo que
agregábamos si ¿Han habido garantías para el desarrollo de las naciones
latinoamericanas, además de ser meras receptoras de importación de
capitales, de reducir nuestros países a meras maquilas, sin cobrar
impuestos, ni ingresos, solo mano de obra barata? Este capitalismo de
“humano” no tenía nada, solo explotar y ofrecer regalías, como lo
hicieron los españoles con nuestros indígenas.
El intento de EEUU de formar mundo Unipolar se sustenta en la guerra
El
intento de EEUU y sus presidentes de turno George Bush (h) y Barak
Obama, de establecer la supremacía mundial a través de la creación de
un estado gendarme en el mundo, caracteriza aún mas la forma
guerrerista de su modelo imperialista, con una visión geopolítica que
nos retrotrae a las guerras mundiales del Siglo XX, donde el control de
los territorios y mercados vuelve a ser la base del modelo capitalista
monopólico. Las invasiones de EEUU en Irak y Afganistán, marcaron la
primera etapa en el control del Medio Oriente y Euro Asia.
Estas
acciones generaron varios conflictos armados con el objetivo, de
controlar los mercados petroleros, creando en su estrategia la
geopolítica, alianza y penetración en una nueva fase, intentan penetrar
los antiguos países y aliados de la extinta URSS, para de esa manera
controlar parte de sus riquezas y a la vez cercar y aislar a Rusia.
Ejemplo es tratar de bloquear a Irán, para luego enfocar su
intervención en Siria, con mercenarios y grupos islámicos radicales,
para luego liquidar con el poder militar y las bombas de la OTAN,
naciones que tienen apoyo del gobierno de Rusia.
Como
parte de una nueva etapa hegemónica desarrollan la estrategia de aislar
a Rusia, como nueva nación emergente, e inclusive a China. La nueva
campaña desestabilizadora del gobierno de Obama fue la preparación del
“golpe suave”, para destituir al presidente ucraniano Víktor
Yanukóvich, que no aceptaba los acuerdos para ingresar como miembro a
la Comunidad Económica Europea (CEE), lo que motivo una sublevación de
la derecha y ultraderecha.
A través de esta
sublevación dirigida, se logro destituir al mandatario, logrando a
través de una elección amañada, designar como presidente a Petró
Poroshenko, magnate multimillonario. Esta situación generó una grave
crisis interna, creando un movimiento separatista en el Este, donde la
mayoría de los ciudadanos son de origen ruso, lo que configuró una
estrategia similar a la Balcanización de Yugoslavia, confirmando
nuevamente que no son casuales, porque son los efectos de los métodos
imperiales de EEUU y la OTAN, para controlar las reservas mundiales en
estas naciones.
La realidad mundial cambio en menos de cuatro décadas
Luego
de una breve exposición de agresiones imperialistas, seguimos
considerando de esta nueva realidad cambiante que demuestra que el
capitalismo no tiene capacidad de regenerar una salida global.
Concebimos los albores de una crisis terminal que podría ser
catastrófica para la sociedad humana. No queremos caer en la ingenuidad
de creer que estamos en los albores de la desaparición del modelo
capitalista, como decía el Comandante Ernesto “Che” Guevara, será una
“larga y prolongada guerra popular”, porque el imperio de EEUU, basa su
poder en lo militar. Pero somos consciente de que hoy la crisis del
modelo capitalista ha sembrado en toda la sociedad del planeta altos
niveles de pobreza en el mundo, dejando a millones de seres humanos con
hambre, millones de seres humanos sin agua, millones de desplazados, y
cientos de miles de ciudadanos asesinados como en Palestina, África,
Medio Oriente. Hoy la humanidad vive estos “efectos colaterales”, como
les dicen el país imperial y sus acólitos expansionistas de la OTAN.
diegojolivera@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario