Adital
La
necesidad de adaptación a los cambios climáticos es un complejo desafío que
requiere nuevos espacios de coordinación y colaboración entre diferentes
niveles de gobierno, especialistas, sociedad civil y comunidades. Así lo observa
la Fundación Avina, organización que contribuye al desarrollo sustentable de
América Latina. En un informe, la entidad evalúa los recientes movimientos de
instituciones y extra-instituciones para adecuarse a las condiciones climáticas
en las que vivimos en la actualidad.
Según
la entidad, para acomodarse al actual contexto, es preciso tener estrategias
para una efectiva gestión del agua, que busquen reducir la vulnerabilidad de
las comunidades ante fenómenos climatológicos, que generan riesgos por exceso o
escasez del recurso. En ese sentido, el cambio climático es de particular
importancia para el sector hídrico porque el agua es el principal medio de
impacto sobre las poblaciones.
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| Es preciso tener estrategias para una efectiva gestión del agua, que busquen reducir la vulnerabilidad de las comunidades ante fenómenos climatológicos |
De
acuerdo con Avina, hay evidencias científicas que revelan transformaciones en
las precipitaciones lluviosas y escurrimiento en la región latinoamericana, y
un aumento, en magnitud y frecuencia, de eventos extremos, como lo son las
inundaciones y las sequías. El número de catástrofes provocadas por
inundaciones en zonas del interior fue dos veces más elevado en la década de
1996-2005 que entre 1950-1980, además de provocar cinco veces más pérdidas
económicas. En esos casos, los perjuicios afectan los sistemas de agua y
saneamiento rurales y urbanos, además de afectar sistemas de irrigación.
Para
las próximas décadas, señala la organización, se estima que la capacidad de los
sistemas de drenaje y de tratamiento de agua podrá ser suplantada por lluvias
intensas; el aumento del nivel del mar podrá salinizar napas freáticas costeras;
sistemas hidroeléctricos podrán ser alcanzados por los cambios de los caudales
de ríos, además de que la demanda de irrigación pueda crecer debido a la menor
precipitación en algunas áreas. Otro riesgo sería causado por las altas
precipitaciones, que podrán aumentar la erosión del suelo y producir la
sedimentación de reservorios y de ríos, afectando, inclusive, su navegabilidad.
"Los impactos del cambio climático son aún más graves cuando los sumamos
al incremento que tiene la región latinoamericana en la demanda por el uso del
agua a causa del crecimiento poblacional y económico, el cambio de hábitos de
consumo de la población y la sobrexplotación y contaminación de las fuentes
superficiales y subterráneas”,
alerta Avina. La entidad señala que las extracciones de agua se han triplicado
en los últimos 50 años y, según proyecciones, la población que vive en cuencas
hidrográficas con demanda excesiva de agua aumentará desde los actuales 4.300
millones de habitantes a 6.900 millones para el 2050.
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| Más del 80% de las aguas residuales en países en desarrollo son desalojadas sin ningún tratamiento |
Datos
dispuestos por la Fundación dan cuenta de que más del 80% de las aguas residuales
en países en desarrollo son desalojadas sin ningún tratamiento. "Injustamente los impactos recaen de forma desproporcionada sobre
aquellos países y grupos sociales que tienen menores capacidades para hacerles
frente. Es decir, la vulnerabilidad de los fenómenos hidro-meteorológicos está
directamente relacionada con los niveles de desarrollo y las condiciones de
pobreza y marginalidad”,
observa la organización.
Medidas para evitar desastres
socioambientales
La
Fundación Avina orienta que la adecuada gestión de riesgos debe enfocarse en la
prevención de desastres y en acciones que promuevan la seguridad hídrica en
América Latina. El desarrollo debe darse de acuerdo con los límites de la
naturaleza y considerar aspectos como el ordenamiento ecológico-territorial y
el caudal ecológico, la restauración de ecosistemas, entre otras medidas.
"Esfuerzos de adaptación a las condiciones de cambio climático pueden
responder a estrategias complejas y requerir de especialistas para su diseño e
implementación o pueden ser sencillas y de fácil planificación y ejecución.
Estas pueden ser impulsadas desde todos los sectores y a todos los niveles”, concluye Avina.
Traducción:
Daniel Barrantes - barrantes.daniel@gmail.com
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