"Nueva
Colombia Noticias rechaza enérgicamente y denuncia ante la opinión
pública la agresión por parte de la policía a los reporteros Arquímedes
Gutiérrez", de ese medio, y de "Luis Fernando Molina, de Marcha
Patriótica", quienes "se encontraban en el desarrollo de sus
actividades", señaló el medio de comunicación en una misiva.
De acuerdo con la
denuncia, los dos reporteros fueron agredidos mientras cubrían un paro
que desde hace una semana mantienen los cultivadores de coca en la
región de Catatumbo, Norte de Santander.
"Estábamos cubriendo y la policía empezó a agredir a los campesinos,
los campesinos salieron corriendo y empezaron a dispararles hacia el
monte, (la policía) miró que estábamos grabando y nos capturaron",
relató Gutiérrez, según declaraciones publicadas por NC Noticias,
agencia de comunicación del partido político nacido tras la disolución
de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.Lea también: Organizaciones sociales de Colombia inician paro nacional ante ola de asesinatos
El comunicador agregó que la retención tomó cerca de una hora y que los policías les rociaron gasolina en el rostro y abofetearon al reportero de Marcha Patriótica tras señalarlos de ser "informantes de los del paro y avisarles a los campesinos para que pudieran hacer emboscadas", luego de lo cual les incautaron por un tiempo sus equipos y celulares.
"Me quitaron las tarjetas donde había grabado cómo la policía le estaba lanzando perdigones a los civiles", agregó Gutiérrez.
NC Noticias denunció el hecho como "un robo de información" y
"agresión a la integridad física de los reporteros", quienes —aseguró—
portaban chalecos, gorras y micrófonos que los identificaban como
personal de prensa.Por último, el medio pidió que las autoridades investiguen la agresión para determinar los responsables de la misma y que se apliquen "las sanciones respectivas".
Más temprano un
camión de carga que se encontraba aparcado en un tramo de la vía
Cúcuta-Tibú, en una región vecina a la que se encontraban los
comunicadores, fue incinerado por dos hombres que, según las
autoridades, infiltraron el paro de cultivadores de coca.
El hecho se presentó cuando una caravana de la Policía del
departamento de Norte de Santander buscaba restablecer la movilidad en
las vías del departamento, donde persisten los bloqueos por parte de los
promotores de esta manifestación.Desde el 1 de noviembre cerca de 1.500 de cultivadores de coca mantienen movilizaciones por las principales vías de ese departamento para exigir al Gobierno central avances en el tema de sustitución voluntaria de cultivos ilícitos.
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