Somos un Colectivo que produce programas en español en CFRU 93.3 FM, radio de la Universidad de Guelph en Ontario, Canadá, comprometidos con la difusión de nuestras culturas, la situación social y política de nuestros pueblos y la defensa de los Derechos Humanos.

domingo, 13 de abril de 2014

Todo vale en este año de elecciones en Brasil

Por Leovani Garcia Olivarez

Brasilia, 12 abr (PL) En este año de elecciones en Brasil, previstas para el 5 de octubre próximo, la presidenta Dilma Rousseff y su gobierno enfrentan acusaciones y denuncias que buscan desgastar la maquinaria gubernamental.
La subida de la inflación por el incremento de los alimentos, presuntas anomalías en Petrobras y supuestos casos de corrupción de diputados del Partido de los Trabajadores (PT), la formación de Rousseff, se suman a la lista de ataques de la oposición para menguar la imagen de la mandataria y su gabinete.

La propia dignataria reconoció en días pasados esta ola de acciones y anunció la voluntad de enfrentarla y no retroceder ni un milímetro en la disputa electoral.

Tenemos experiencia de esto, porque ya pasamos por esto en 2006 y en 2010, sobre la utilización en este periodo que antecede a la campaña electoral de todos los instrumentos posibles para desgastar a la administración nacional, aseveró.

Bloques de oposición, encabezados por el Partido de la Social Democracia (PSDB), persisten en el Congreso con investigar presuntas anomalías registradas en la compra en 2006 de la refinería Pasadena en Estados Unidos por Petrobras.

El Senado decidirá el martes próximo la creación de una Comisión para pesquisar a esa empresa y también los cárteles creados entre 1998 y 2008 para conseguir contratos en trenes y metro de Sao Paulo durante los gobiernos tucanos (del PSDB).

Los legisladores opositores rechazaron la ampliación de las investigaciones y presentaron una demanda ante el Supremo Tribunal Federal para que falle a su favor y se indague sólo a la empresa petrolera nacional.

Según medios de prensa, Petrobras pagó mil 180 millones de dólares por la refinería Pasadena, mientras en 2005 la empresa belga Astra Oil la había adquirido por poco más de 42 millones de dólares.

Este negocio involucra asimismo a la jefa de Estado, pues ella en ese año era jefa de la oficina presidencial y miembro del consejo directivo del consorcio petrolífero, que autorizó dicha adquisición.

A esto se suma la confiscación ayer de documentos de las oficinas del ente estatal petrolero en Río de Janeiro, debido a la probable implicación de funcionarios de esta compañía en una operación de lavado de dinero.

Se estima que empleados de esa empresa participaron en una red de negocios ilícitos y evasión de divisas que movió unos cuatro mil 300 millones de dólares.

Entre otros presuntos involucrados en estos ilícito aparece también el diputado del PT Andrés Vargas, quien renunció el miércoles último a la vicepresidencia de la Cámara baja, debido su relación, aún no aclarada, con Alberto Youssef, dueño de una casa de cambio y arrestado como supuesto miembro de la red de lavado de dinero.

Trascendió igualmente que el diputado realizó gestiones con el Ministerio de Salud a favor de Youssef, interesado en montar una planta de medicamentos.

En este contexto, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva demandó una ofensiva del gobierno y del Partido de los Trabajadores para refutar todas estas acusaciones y defender este proyecto de país.

"No se puede permitir que, por nuestra incapacidad, las mentiras sigan prevaleciendo", resaltó Lula al recalcar la necesidad de mantener la unidad del partido, dejar a un lado las disputas internas y enfrentar a la oposición.

"La élite nunca fue condescendiente con la izquierda y la izquierda siempre fue condescendiente con la élite", dijo el exgobernante.

En medio de estos problemas, el aumento de alimentos, en especial de las viandas y hortalizas, generó un disparo de los precios y malestar entre la población, que manifiesta preocupación por la situación de la economía.

Aunque las encuestas señalan a Rousseff como la favorita para reelegirse en los comicios de octubre próximo, muestran asimismo un declive en su popularidad, lo cual preocupa a la cúpula del PT y aliados de la mandataria.

Para los analistas, la oposición seguirá escarbando donde no hay para encontrar deslices e incrementar su arremetida contra el gobierno y la jefa de Estado, pues en este año electoral todo vale, cuando se trata de ambiciones políticas.

acl/lgo

No hay comentarios: