Fuerzas Armadas bolivianas lucharán contra el crimen organizado

PL/La Radio del Sur

(Foto: Archivo)

Las Fuerzas Armadas bolivianas lucharán para evitar que la ilegalidad y el crimen organizado se apoderen de algunas regiones del país, aseguró el jefe de Estado Mayor, Adolfo Vásquez.

Vásquez aseguró que la intervención a Challapata es para sentar precedente, restablecer el orden legalmente constituido y una advertencia de las Fuerzas Armadas, que no se tolerará que la ilegalidad campee en ningún punto de Bolivia.

El jefe de Estado Mayor realizó una inspección ocular a los puntos de control y patrullaje de las fuerzas combinadas en esa población del occidental departamento de Oruro.

Aseveró que luego de los sucesos del martes, cuando las bandas de contrabandistas resistieron la presencia del Estado, con un saldo de dos civiles muertos y tres militares heridos, hay una tensa calma en la zona.

Asimismo, dijo que cesó la explosión de petardos y otros explosivos que se escucharon varias noches como una forma de rechazar la presencia de efectivos del Ejército, de la Fuerza Aérea, de la Armada y de la Policía.

Vásquez informó que en Challapata están desplazados al menos mil 500 efectivos, qu
e forman parte de la operación, en la que se confiscaron 70 vehículos “chutos” o indocumentados.
Sin embargo, el alto jefe militar calculó que hay más vehículos que están ocultos en garajes o que fueron puestos “a buen recaudo”, por redes de contrabandistas.

Por esa razón, justificó un patrullaje sostenido con carros de asalto, camiones y camionetas con personal militar y policial que hacen recorridos por las calles de Challapata para evitar la fuga de implicados o la salida de vehículos “chutos”.

Esta localidad era un lugar importante para nosotros porque aquí estaba campeando la ilegalidad, pero no vamos a permitir más contrabando ahí, las actividades ilegales terminaron, enfatizó.
El jefe militar explicó que no toda la población está implicada con ese ilícito.

Por su parte, el director General de Régimen Interior y Policía, Douglas Sahagum, dijo que la presencia del Estado será permanente en esa zona, por decisión del Gobierno y para sentar soberanía.
Dos personas murieron este martes y otras tres resultaron heridas durante la requisa a garajes y talleres mecánicos por el ejército y la policía en esta población, convertida los últimos años en santuario de contrabandistas de automóviles de segunda mano, confirmaron fuentes oficiales.