México, el PRD en su laberinto

Sergio Pochón – Alternativa Latinoamericana
En estos tiempos que nuestra América camina hacia el socialismo como la mejor opción dada la creciente derrota política, económica y militar del imperialismo norteamericano, observamos como los politiqueros oportunistas de derecha se funden, crean alianzas o se mueven a los partidos de la llamada izquierda.

Por que llamada izquierda? ­porque no basta con etiquetar un partido, una persona o una postura para llamarse de izquierda, se necesita convicción, una coherencia sistemática de acciones y tristemente lo que vemos en el PRD, no puede estar mas alejado de una verdadera convicción izquierdista, en el general del pueblo persiste la idea del partido de izquierda, pero no es mas que un partido con un puñado de políticos oportunistas que en su formación política se iniciaron en partidos de derecha que llevo al país a donde se encuentra.

Es importante observar por un lado a la fracción Izquierda Unida que dice defender los intereses del pueblo, una izquierda activa que presenta diferencias a las practicas neoliberales, que avala proyectos e incita a debates abiertos al ciudadano común y en contraste por el otro la fracción Nueva Izquierda “ a la derecha” corriente complaciente alineada al federal que los gobierna avalando y legitimizando los actos del presidente de facto, entonces nos preguntamos de que izquierda estamos hablando.

El PRD más que un partido de izquierda es una sopa de letras donde caben una diversidad de palabras nada cercanas a; izquierda, solidaridad, coherencia, etc, este partido ha dejado claro que ser político de izquierda tiene como único fin o convicción velar por los intereses propios, lo cual no le hace diferente a los demás políticos o partidos, en la derecha como en la izquierda existen diferentes corrientes, unas mas radicales que otras, pero la diferencia la hace la derecha que mas organizada cierra filas en los momentos cruciales para la defensa de su convicción neoliberal impuesta por el american life que le permita continuar detentando el poder en cambio la izquierda se desgasta cada vez mas en sus luchas internas de poder.

Pero vayamos un poco atrás para recordar la historia de este partido y así lograr una mejor comprensión de lo que sucede; el PRD nace como una coalición de diversos partidos políticos de izquierda, antes de ser bautizado como PRD, su origen es el Partido Mexicano Socialista (PMS) que nace de la fusión de 6 fuerzas políticas de Izquierda a nivel Nacional: Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT), Partido Socialista Unificado de México (PSUM), Partido Popular Revolucionario (PPR), Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP), Unión de la Izquierda Comunista (UIC) y el MAUS; más adelante se unen a la fusión una parte de la militancia del Partido Socialista de los Trabajadores (PST).

El naciente Partido Mexicano Socialista cede su registro en alianza con ex miembros del PRI y organizaciones civiles que se opusieron al partido gobernante y pugnaron por elecciones democráticas, y nace el nuevo partido pero este necesitaba un líder con carisma y aparece el Mesías Cuauhtemoc Cárdenas gobernador del estado de Michoacán y quien venia de ser excluido de su partido el PRI y opta por cruzar la carpeta del PRI al PRD y por obra y gracia del espíritu santo se da la conversión de derechista a izquierdista, pero no es el único miembro de este partido que viene de la derecha el propio Andrés Manuel López Obrador también viene de militar en el PRI.

Las elecciones internas

A pocas semanas de las elecciones internas del Partido de la Revolución Democrática de México, (PRD), todo parece indicar que no habrá chaman ni purgante poderoso que pueda limpiar el proceso electoral de ese partido que es la segunda fuerza política que dice representar a la izquierda mexicana.

Tanto Jesús Ortega como Alejandro Encinas poseen una vasta experiencia política partidista pero con un raquítico roce social, su currículum parece diseñado para escalar los puestos políticos que hasta la fecha han ocupado, pero que sin embargo, ahora se ven ensombrecidos por una incansable lucha de poder que permitirá la consecuencia al grupo que dará un vuelco de ciento ochenta grados a la practica partidaria, ya que será o el apoyo a un gobierno con la actitud servil de un partido que negocia y prostituye o la otra, el apoyo a un líder desgastado como Andrés Manuel López Obrador

Las elecciones del PRD han sido el tema del diario en los medios corporativos de comunicación, vemos a un Alejandro Encinas confiado y sereno, como quien dice el que nada debe nada teme, mientras a un Jesús Ortega, angustiado que hace recordar la actitud calderonista al tener que hacer frente al pago de facturas que lo llevo a uno de los mayores fraudes electorales de su partido en el gobierno

Las múltiples pruebas de fraude cometidas por partidarios de las diferentes fracciones del PRD le han restado credibilidad no solo a la elección sino al partido mismo, lo cual ha sido utilizado por los medios corporativos de comunicación para desprestigiar aun mas el movimiento social obstáculo para sus necesarias reformas neoliberales que permitirán el abuso de los grupos de poder al pueblo mexicano.

Una vez mas queda evidenciado que estos que se llaman nuevos izquierdistas, no son mas que un grupo de políticos inconformes que por alguna extraña razón no tuvieron cabida en el partido de la derecha y que, a palabras de un psicólogo dictaminaría que con sus actos proyectan la alianza a su verdadera convicción, que no lograron cuotas de poder en sus respectivos partidos y optan por la salida publica mas afín que los libraría del maleficio de la traición, para convertirse así en los defensores del pueblo.

Para salir de su laberinto y recobrar así la credibilidad, necesita una purga tan grande que permita el verdadero inicio de una izquierda limpia, sin malformaciones que permita darle auge a los verdaderos progresistas, de mantenerse los mismos integrantes no pasara de ser otro partido del montón que no representa una alternativa de cambio.

La defensa del petróleo

Mientras la fracción de izquierda unida liderada por AMLO apuesta a la resistencia civil y defender el petróleo mexicano la otra fracción recibe con beneplácito la idea de la privatización de petróleos mexicanos así lo informo Ruth Zabaleta integrante de nueva izquierda.

La defensa de petróleos mexicanos PEMEX, debería ser una obligación moral de cada ciudadano y las movilizaciones por la defensa del valioso energético, serán en la posteridad, vistas como verdaderos actos heroicos de las brigadas patrióticas, que están dispuestas no solo a defender su patrimonio, sino su dignidad y soberanía, el reto será que estas mismas movilizaciones no sean mediatizadas ni para probar el grado de convocatoria de AMLO, ni para rescatar la imagen de un líder que ha sido cuestionado por la consecuencia de sus actos, pues esta férrea lucha emprendida por AMLO para la defensa de PEMEX, no ha sido la misma respuesta ante otras reformas constitucionales que han vulnerado los derechos de los mexicanos .