Cristina Fontenele
Adital
Informe del Fondo de las Naciones
Unidas para la Infancia (Unicef) – Situación de la Infancia y
Adolescencia en El Salvador– revela que los niños y adolescentes en El Salvador enfrentan cotidianamente
la violencia. El país centroamericano fue uno de los primeros países en ratificar
la Convención sobre los Derechos del Niño, lo que permitió algunos avances. Sin
embargo, el largo historial de regímenes autoritarios institucionalizó la
violencia en la sociedad y en las relaciones familiares. El Salvador es
considerado hoy uno de los líderes mundiales en violencia contra la infancia y la
adolescencia.
Para Adela Pineda, responsable de la
Juventud de la Asociación Cristiana de Jóvenes (ACJ) de El Salvador, "El
sufrimiento, el dolor y la violencia siguen marcando la vida de hombres y
mujeres en El Salvador.” Según Adela, el temor, la violencia y la exclusión
social continúan siendo la realidad que diariamente enfrentan los jóvenes
salvadoreños. En la edición de marzo del informativo mensual del Observatorio
de Medios sobre Derechos de la Juventud Salvadoreña, de las 15 noticias
divulgadas, 10 están relacionadas de alguna forma con la violencia contra la
juventud.
Datos del informe de Unicef alertan también
que tres de cada diez mujeres han sufrido alguna agresión física antes de cumplir
los 18 años de edad. En 2013, fueron 3.491 los casos de agresión sexual, nueve de
cada diez víctimas del sexo femenino. El 73,6% de las violaciones fueron
cometidas contra niñas y adolescentes menores de 19 años. Del total de las
violaciones registradas en el año 2013, en el 76,6% de los casos el agresor era
el cónyuge, un vecino o un conocido. El 80,2% de los homicidios cometidos
contra menores de 18 años fueron contra niños.
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| Tres de cada diez mujeres han sufrido alguna agresión física antes de cumplir los 18 años de edad. |
En 2011, 6.113 menores de edad en
conflicto con la ley fueron sometidos a la jurisdicción penal, el 13,4% por
asociación ilícita, el 12,5% por extorsión, el 11,8% por robo y el 11,6% por
homicidio. En 2012, el 35,2% de los jóvenes detenidos lo fue por homicidio y el
30,1% por extorsión. Sin embargo, al contrario de lo que podría imaginarse,
ocho de cada diez delitos en El Salvador son cometidos por adultos y no por
adolescentes.
De cada dos niños y adolescentes,
uno vive en situación de pobreza, el número sale de estadísticas sobre trabajo
infantil. El 4,4% de los niños en la franja etaria de cinco a trece años está
trabajando y también el 23,1% en edades de 14 a 17 años. De acuerdo con el
informe de Unicef, en 2013 cerca de 187.428 niños y adolescentes realizaron
alguna actividad económica; 144.168 se encuentran trabajando, lo que representa
el 8,5% de los niños y adolescentes de cinco a diecisiete años. Una grave
consecuencia del trabajo infantil es el abandono escolar.
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| Pobreza y violencia forman parte de una infancia que vive con miedo. |
En el informe se señala también que
cerca del 33,7% de los niños de cuatro a seis años (107.667 niños) no van a la
escuela. Entre las principales razones de la deserción está la voluntad de los
padres: el 39,1% de los padres no quiere matricular a sus hijos y en el 50,6%
de los casos los padres consideran que los niños tienen aún poca edad.
En los últimos años, las escuelas de
El Salvador se vienen convirtiendo también en áreas de violencia, odio y discriminación.
De acuerdo con el Sindicato de Maestros de la Educación Rural, Urbano-marginal
de El Salvador (Simeduco), las pandillas se apoderan de las instalaciones
escolares para realizar reuniones y planear delitos. Las autoridades estarían
en conocimiento del tema, pero no combaten el fenómeno.
Según el Ministerio de la Educación,
en 2011, 139 estudiantes fueron asesinados en El Salvador. La inseguridad en
las escuelas sigue asustando a padres, alumnos y profesores. Un dato
preocupante es que casi un tercio de los jóvenes de 18 a 24 años no estudia ni trabaja,
por eso se los conoce como la generación "ni-ni”.
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