Marcela Belchior
Adital
Una riña política interna
acaba de dividir, por primera vez, al movimiento civil opositor cubano Damas de Blanco. Las disidentes
anunciaron la creación del nuevo colectivo, bautizado "Ciudadanas por la
Democracia” (CxD), que va a tener sede en Santiago de Cuba y como principal
gestora a Belkis Cantillo, destituida anteriormente del grupo. Prosiguiendo con
las banderas de defensa de derechos civiles, políticos, económicos, sociales y
culturales, la renuncia masiva pretende reclutar adhesiones en todo el
territorio nacional.
Las 30 mujeres que dejaron
el movimiento, en agosto de este año, afirman que su líder, Berta Soler,
comanda el colectivo con prácticas autoritarias, teniendo ella un "carácter
violento”. Además, denuncian que Berta estaría desviando parte de los fondos
económicos llegados de Estados Unidos, que financian al movimiento, hacia un
pequeño grupo dirigente. En el monto de fondos desviados, estaría involucrado,
inclusive, un premio por el valor de 50 mil euros, concedido por el Parlamento Europeo al
movimiento.
La delación de las
renunciantes indica también que la recompensa financiera enviada por Estados
Unidos a las integrantes del grupo individualmente por cada acto de protesta
fue rebajada abruptamente de 30 pesos a 15 pesos, sin explicación por parte de
la dirección del movimiento. Esto habría comenzado inmediatamente después de que
Berta Soler asumiera la jefatura del grupo, después del fallecimiento de Laura
Pollán, en 2011.
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| Damas de Blanco son acusadas de recibir financiamiento de
potencias capitalistas para debilitar política socialista. Foto: Martí
Noticias. |
Las denuncias parten de
siete miembros (Leonor Reino Borges, Mirtha Gregoria Gómez, Raquel Castillo Lorenzo y
Ana Luisa Rubio Beze) y de ex-miembros (Lilia
Castaner Hernández, Miriam Reyes Gómez y Katia Sonia Martín Véliz) del colectivo y son apoyadas por las disidentes, que califican la
postura de Berta como "dictatorial”.
La última de ellas, Katia
Sonia Martín Véliz, inclusive, representa en Cuba al grupo ilegal de extrema
derecha "Cuba Independiente y Democrática” (CID),
que llegó a ser dirigido desde Miami, Estados Unidos, por Huber Matos. Muerto
en febrero de este año, el conocido ex-comandante de la Revolución Cubana luchó
para derribar al gobierno dictatorial de Fulgencio Batista, pero posteriormente
fue acusado de sedición, llegando a tener un enfrentamiento con armas con
Ernesto Che Guevara y el revolucionario Camilo Cienfuegos. Él fue condenado a
prisión por 20 años y se convirtió en crítico declarado del régimen comunista
de Cuba.
Recientes acciones contra el gobierno
Hace un año Berta y Belkis
viajaron por varios países recibiendo el apoyo de líderes políticos
capitalistas y de medios de comunicación hegemónicos, además de homenajes al movimiento.
Ambas pedían que la comunidad internacional mantuviese "mano firme” en contra
de Cuba, manteniendo el bloqueo económico de Estados Unidos y aplicando
sanciones desde la Unión Europea a través de la llamada Posición Común, que viola
la libre determinación del país caribeño.
El Movimiento
de Solidaridad con Cuba, compuesto por organizaciones e individuos
alrededor del mundo, que apoya la libertad para los cubanos del gobierno de los
hermanos Fidel y Raúl Castro (desde 1959), a través de una transición
democrática, hace varios años, denuncia a Damas de Blanco y a otros grupos
disidentes de ser financiados por el gobierno de Estados Unidos, gobiernos de
la Unión Europea y empresas mediáticas internacionales, en forma directa o a
través de entidades intermedias.
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| Belkis Cantillo (a la izquierda) fundó un nuevo colectivo
después de denunciar a Berta Soler (a la derecha) de desviar fondos del grupo.
Foto: Cuba Matinal. |
Entienda al movimiento
Las Damas de Blanco son un
movimiento cubano que reúne a esposas y a otros familiares de presos cubanos,
considerados presos políticos por parte de la sociedad cubana y presos comunes
por parte del propio Gobierno de Cuba. El movimiento y organizaciones que las
apoyan entienden que los presos son "activistas democráticos”, que sufrieron
represión por ser disidentes del gobierno de Fidel Castro. Los socialistas, a
su vez, señalan que Damas de Blanco es un "instrumento político del
imperialismo estadounidense”, argumentando que ellas cometieron delitos de
espionaje e hicieron conexiones con la Agencia de Inteligencia Central (CIA, por su sigla en inglés) de Estados
Unidos.
El movimiento surgió en
2003, con 75 miembros, después de la llamada Primavera Negra de Cuba, serie de
detenciones contra opositores del entonces presidente Fidel Castro, que fueron
sometidos a juicios sumarios. Ellos fueron condenados a penas de hasta 28 años
de reclusión, acusados de realizar acciones contra la protección de la
independencia y la estabilidad nacional de la economía cubana.
Desde entonces, las mujeres
realizan articulaciones en defensa de los derechos de los presos de la isla,
portando retratos de sus familiares encarcelados y vestidas de blanco. El año
2006, el grupo fue agraciado con un premio de la organización no gubernamental
(ONG) Human Rights First, que tiene
sede en Nueva York. En 2010, el movimiento recibió manifestaciones de apoyo
llegadas de ciudades estadounidenses, como Los Ángeles, Nueva York y Miami.
Infiltración estadounidense
El grupo es blanco constante
de críticas de parte del gobierno cubano, que las considera "mercenarias”.
También llegaron a recibir el repudio de parte de la Federación de Mujeres
Cubanas, organización que trabaja por políticas públicas en pro de la
emancipación feminista. Sectores oficialistas caracterizan al movimiento como
una estrategia estadounidense para debilitar el proceso revolucionario cubano a
través de la "fabricación de líderes artificiales y de simbologías”.
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