El mandatario celebró el hecho que los candidatos partidarios de mantener ese modelo tienen hasta ahora las mejores opciones para ganar las elecciones generales del próximo 10 de abril.
Añadió ante un auditorio de empresarios que, a diferencia de 2006, cuando ganó ajustadamente la segunda vuelta electoral frente a Humala, ahora "ya no hay un riesgo antisistema como hace apenas cinco años se presentaba en el horizonte".
Dijo que la gran mayoría de los electores apoyan el modelo vigente, aunque un diario local anota que más de 70 por ciento de los peruanos no están contentos con la política económica y quieren cambios, según recientes encuestas.
García alentó por tanto a los hombres de negocios a no caer en temores ni ansiedades por la contienda electoral y a mantener sus inversiones y proyectos porque "se va a mantener el rumbo del país, cualquiera sea el apellido de quien nos gobierne".
Humala, quien es nuevamente candidato y está en cuarto lugar en los sondeos, rechazó las declaraciones de García y dijo que evidencian su posición antidemocrática y golpista, al promover un sucesor que "le cuide las espaldas" y no investigue la corrupción del actual gobierno.
Añadió que los observadores internacionales deben estar alerta ante lo que consideró un posible fraude digitado por García para hacer ganar a un candidato afín.
Los tres primeros de las encuestas, el expresidente Alejandro Toledo, el exalcalde de Lima Luis Castañeda y la hija del expresidente Alberto Fujimori, Keiko, se comprometieron a mantener el modelo neoliberal.
Sobre el término antisistema con el que lo aludió el jefe de Estado, Humala respondió que "si el sistema es la corrupción, vender y no defender Perú, destruir la agricultura nacional y beneficiar a cuatro grupos económicos, entonces soy antisistema".
Agregó que si el sistema hiciera una revolución educativa y defendiera la salud de la población, entonces él sería defensor del sistema.
La semana pasada, García hizo un comentario similar sobre la hegemonía del modelo y dijo que en 2006 Perú se había librado de un sistema de corte estatista.
Humala respondió que si los nacionalistas hubieran ganado las elecciones de 2006, no hubiera imperado la corrupción presente.
Recordó que el actual gobernante ganó esos comicios con promesas de cambio responsable, pero no cumplió y truncó las aspiraciones de los peruanos.
Añadió que él propuso un proyecto de crecimiento con distribución de la renta y disminución de las abismales desigualdades sociales y sin "la corrupción que hoy asola todo el aparato del estado".
Humala aseguró que él sí cumplirá sus promesas y hará un gobierno de paz social, en el que los niños no morirán de frío como los 200 menores fallecidos por esa causa ni habrá represión.
Humala exigió a García que permanezca en Perú, después de terminar su mandato, el 28 de julio próximo, para que responda por los muertos en la represión de protestas sociales.
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