Buenos aires. La Asociación de Trabajadores del Estado 
(ATE) denunció ayer que los burócratas de la provincia sureña de Neuquén
 fueron conminados a concurrir a un acto de campaña del presidente 
Mauricio Macri bajo amenaza de ser despedidos, descontarles el día o 
suspender los ascensos, en momentos en que los sindicatos de esos 
gremios realizaban una marcha de rechazo contra la presencia del 
mandatario, mientras en todo el país continúan las movilizaciones de 
distintos sectores ante el cierre de fábricas importantes, lo que agrava
 la situación de los despedidos, que suman más de 2 millones.
El gobierno lleva a cabo una campaña sucia contra la oposición, 
utilizando las redes sociales y los medios de comunicación hegemónicos 
que responden al Ejecutivo, mientras diversos sectores denuncian las 
últimas medidas del Ministerio de Seguridad, que dispuso volver a los 
viejos métodos dictatoriales del control de los documentos de identidad 
(DNI), por lo cual incluso detienen autobuses de larga y corta distancia
 y revisan a los pasajeros. Todo esto con una propaganda en favor de las
 fuerzas policiales; la ministra Patricia Bullrich advierte 
queremos cuidar a los viajeros.
El Ministerio de Seguridad tiene asesoría de Israel.
Fueron liberados ayer los empresarios de medios de comunicación 
Cristóbal López y Fabián De Sousa, por orden de la Cámara Federal, 
después de dos años de ilegal prisión preventiva, al revocar una 
resolución del juez Claudio Bonadío, uno de los más activos en la 
judicialización de opositores, que se negaba a liberarlos, a pesar de 
que no habían cometido ningún delito. También estaban acusados en la 
ilegal 
causa de las fotocopias, mediante la cual Bonadío mandó a la cárcel a decenas de personas, procesando a otras sin ninguna prueba y manteniéndolas en prisión preventiva. En estos días han salido cinco detenidos, entre ellos el sociólogo Fernando Esteche, que estuvo en una cárcel de máxima seguridad, aún no se sabe claramente por qué causa, aunque fundamentalmente por falsas acusaciones.
Bonadío debió dejar libres a los empresarios dueños del canal C5N, el
 único crítico del gobierno de Macri, así como de radios que también 
emiten información con noticias veraces, por lo cual el gobierno intentó
 cerrarlos y no lo logró gracias a la resistencia periodística.
Stella Calloni
Corresponsal
Periódico La Jornada
 

 
 
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