El presidente de Ecuador, Rafael Correa, alertó este miércoles que el intento de golpe de Estado contra su gobierno no ha terminado, por lo que llamó al pueblo a estar preparados para rechazar cualquier intento de nueva sublevación policial.
El mandatario afirmó que lo ocurrido el jueves pasado cuando uniformados se insubordinaron “ha sido una medición”, razón por la cual “debemos prepararnos para el resto”, informó la multiestatal Telesur.
El jefe de Estado explicó que con uniformados como los que lo mantuvieron más de diez horas secuestrado en un hospital de Quito, “es imposible decir que en el futuro no se podrá esperar algún incidente”.
“Va ser muy difícil en el futuro garantizar que una situación, tal vez no de esa magnitud, pero un atentado puede ocurrir”, sostuvo Correa.
El mandatario llamó a detectar a los golpistas en las filas policiales de esta gente, pero será muy difícil detectar a todos, y mientras exista esa gente en las filas policiales va a ser muy difícil que no haya un acto violento o un exceso policial en el futuro”, alertó.
Correa acusó nuevamente al ex mandatario ecuatoriano Lucio Gutiérrez y a su partido Sociedad Patriótica (SP) por los planes desestabilizadores
El presidente también reveló que dentro de las fuerzas de seguridad “se está creando el Grupo Armado Policial (GAP)”, organización parapolicial que busca manipular y conspirar.
Luego de las investigaciones puestas en marcha por la Fiscalía ecuatoriana, fue capturado Fidel Araujo, colaborador en el Gobierno de Gutiérrez, luego de su aparición en el Regimiento Nº 1 de Quito donde comenzó la sublevación policial.
Otros 46 efectivos han sido detenidos por su presunta participación en los hechos de la semana pasada.
El ministro de Interior, Gustavo Jalkh, aclaró que las detenciones son de carácter preventivo por 24 horas y tras la audiencia que será efectuada este miércoles “se determinarán otras medidas”.
Correa expresó que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama “no tuvo nada que ver” con el intento de golpe de Estado.
Sin embargo señaló que en este tipo de acciones, los grupos de oposición ecuatorianos actúan bajo el financiamiento de organizaciones de extrema derecha estadounidenses.
En el encuentro, el dignatario aseguró que pensó que iba a ser asesinado mientras se encontraba secuestrado en el Hospital de la Policía, en cuyo interior se hallaban uniformados sublevados.
Durante la jornada de ayer, la agencia de noticias Andes difundió grabaciones de la Radio Patrulla de Quito donde algunos policías llamaban a asesinar a Correa.
AVN
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