Desde los estudios Frank Ryan de CFRU
en la Universidad de Guelph en Ontario Ca.
Madeleine Speed, Hilda Venegas y Sergio Pochón
presentan
Alternativa Latinoamericana
Bienvenida al Programa
con Sergio Pochón
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Nuestro resumen semanal de noticias con el acontecer latinoamericano
de las noticias más destacadas en los últimos días
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Contagio Radio
¿Plan de Desarrollo Nacional de Duque se olvidó de la paz?
¿Plan de Desarrollo Nacional de Duque se olvidó de la paz?
El Congreso fue citado a sesiones extraordinarias que se surtirán en los próximos días, las bancadas se han reunido y tanto la oposición como la bancada de Gobierno preparan sus argumentos para la discusión sobre el Plan de Desarrollo Nacional 2018-2022. El Gobierno ha dicho que es un Plan con enfoque en el gasto social; mientras víctimas, analistas y senadores de la oposición afirman que es un plan que ignora la implementación del Acuerdo de Paz entre otros asuntos. El senador por el Polo Democrático, Iván Cepeda señaló que desde la oposición ya se está discutiendo el Plan, y en sus análisis encontraron que el plan está puesto en dirección de cerrar las puertas a la implementación del proceso de paz, y nada tiene que ver con los supuestos pilares del gobierno Duque: Equidad, Legalidad o Convivencia Pacífica. Adicionalmente, han extraído los que parecen ser los peores aspectos de este plan, y que deberían ser modificados en las discusiones del legislativo.
La implementación del proceso de paz: El Senador del Polo sentenció que el Plan de Desarrollo planteado es inconstitucional, porque no incluye destinaciones concretas para la implementación del Acuerdo de Paz, pese a que la Corte Constitucional determinó que esos recursos debían garantizarse por 20 años, como también lo avaló el abogado e integrante de la Coordinación Colombia, Europa, Estados Unidos (COEUROPA), Alberto Yepes.
escucha la 1a hora de Alternativa Latinoamericana aqui
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Desde el puente internacional Simón Bolívar, frontera con Cúcuta, Colombia.
Así está la realidad en este lugar del que tanto se habla. Juzgue usted con su video.
Ilka Oliva Corado
La resistencia de Hayashi Fumiko
“Si este libro influye en algo para que los jóvenes de hoy, arrastrados hasta el fondo de la pobreza, la intranquilidad y las carencias, sigan viviendo, no habrá nada que me cause mayor alegría”. Así cierra el prefacio de su libro Diario de una vagabunda, Hayashi Fumiko, en 1939. (Publicado inicialmente por entregas entre 1928 y 1930). Diario que escribió entre 1922 y 1927, digamos que entre los 18 y los 23 años de edad, cuando la miseria y el dolor de la exclusión social le arrancaban la piel a tirones, en su andar de obrera por infinidad de trabajos de mala paga, y en su potestad de inquilina de paso por la alcantarilla japonesa de 1920.
Hayashi, una niña crecida como vendedora ambulante junto a sus padres, nunca tuvo el calor de un nido, un pueblo al cual añorar, ni memorias de un jardín florecido en verano que embelleciera los ventanales de una casa a la cual regresar en la evocación del tiempo; para refugiar su alma de vagabunda. Hayashi, en la angustia y la desesperación de las circunstancias a las que se ve expuesta diariamente, pues no tiene un lugar fijo dónde dormir, alquila una habitación en cualquier posada o duerme en sus lugares de trabajo; lejos de donde deambulan sus padres con su carreta ofreciendo su mercadería en los pueblos que van apareciendo a su paso en su andar de itinerantes. Se entera de su ubicación por las cartas que le escribe su madre y que llegan a veces con alguna moneda que sirve como aliento, mismas que ella contesta también y a las que de cuando en cuando agrega alguna moneda; para medicina, para alquiler o para comida de sus padres.
“Si este libro influye en algo para que los jóvenes de hoy, arrastrados hasta el fondo de la pobreza, la intranquilidad y las carencias, sigan viviendo, no habrá nada que me cause mayor alegría”. Así cierra el prefacio de su libro Diario de una vagabunda, Hayashi Fumiko, en 1939. (Publicado inicialmente por entregas entre 1928 y 1930). Diario que escribió entre 1922 y 1927, digamos que entre los 18 y los 23 años de edad, cuando la miseria y el dolor de la exclusión social le arrancaban la piel a tirones, en su andar de obrera por infinidad de trabajos de mala paga, y en su potestad de inquilina de paso por la alcantarilla japonesa de 1920.
Hayashi, una niña crecida como vendedora ambulante junto a sus padres, nunca tuvo el calor de un nido, un pueblo al cual añorar, ni memorias de un jardín florecido en verano que embelleciera los ventanales de una casa a la cual regresar en la evocación del tiempo; para refugiar su alma de vagabunda. Hayashi, en la angustia y la desesperación de las circunstancias a las que se ve expuesta diariamente, pues no tiene un lugar fijo dónde dormir, alquila una habitación en cualquier posada o duerme en sus lugares de trabajo; lejos de donde deambulan sus padres con su carreta ofreciendo su mercadería en los pueblos que van apareciendo a su paso en su andar de itinerantes. Se entera de su ubicación por las cartas que le escribe su madre y que llegan a veces con alguna moneda que sirve como aliento, mismas que ella contesta también y a las que de cuando en cuando agrega alguna moneda; para medicina, para alquiler o para comida de sus padres.
- La niñez descalza -
En nuestra ignorancia celebramos imágenes cuya crudeza debería golpearnos la conciencia.
Las redes sociales suelen funcionar como un buen termómetro social. En ellas se suceden comentarios e imágenes, los usuales despliegues de una visión particular del mundo en el cual vivimos. En ellas la infancia tiene por lo general una fuerte presencia, aunque desde esa visión patriarcal que la ubica en un plano subordinado y dependiente. Algo que no logramos entender desde nuestra posición de adultos, es nuestra responsabilidad respecto de la seguridad y el respeto por los derechos de ese inmenso sector de niñas, niños y adolescentes cuyo presente y futuro depende íntegramente de las decisiones de otros y cuyo destino suele estar marcado desde un nacimiento rodeado de privaciones.Las caritas sonrientes frente a la cámara, de niñas y niños descalzos y pobremente vestidos, deberían avergonzarnos y no ser motivo de comentarios superficiales teñidos de compasión. Hemos normalizado la miseria de la infancia hasta el extremo de usarla en postales, como si esa injusticia fuera una parte legítima de nuestro entorno social, del mismo modo como hemos normalizado el embarazo en niñas y adolescentes y la violación sexual en el seno del hogar, en la escuela o en los ámbitos eclesiásticos. La sociedad se ha blindado contra la agresión de su propia naturaleza y, revistiéndose de supuestos principios morales, ha condenado a sus nuevas generaciones a toda clase de vejámenes cuyas consecuencias las marcan de por vida. Por ello, esa resistencia a comprender y sobre todo, aprehender el significado profundo de los derechos humanos y su impacto en las decisiones cotidianas y la relación con los demás también constituye una forma de agresión transformada en estilo de vida.
Columna
Carlos Maldonado
Andrés Manuel Lopez Obrador está a favor de la ayuda humanitaria a Venezuela
Andrés Manuel Lopez Obrador está a favor de la ayuda humanitaria a Venezuela
palabras del Presidente de Mexico sobre la ayuda humanitaria tan necesaria en los pueblos con pobreza
Andrés Manuel Lopez Obrador está a favor de la ayuda humanitaria a Venezuela... ...y a Haití, y a millones de mexicanos y mexicanas. Y sin mezclar ayuda humanitaria con propósitos políticos, y mucho menos intentando utilizar la fuerza.
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TIEMPO DE MUJERES
Desde cfru 93.3 fm la Radio de la Universidad de Guelph
en Ontario, Canadá
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uno de los objetivos esenciales en la lucha de las mujeres es la paridad, la igualdad de condiciones de las mujeres en la sociedad, y para lograrlo es necesaria la organización, una agenda que nos permita presionar a nuestros gobernantes de las necesidades de esta parte de la población, es necesario también defender nuestros derechos civiles y políticos para poder acceder a puestos que nos permitan tener una verdadera democracia porque si mujeres no la habrá
Hoy recordamos a Berta Cáceres líder indígena lenca, feminista y ecologista hondureña, cofundadora de el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) para luchar por los derechos de los y las indígenas lencas, Berta ganó el Premio Medioambiental Goldman, máximo reconocimiento mundial para activistas del medio ambiente, ella fué asesinada por la dictadura en Honduras después de años de haber recibido amenazas contra su vida,su asesinato ha sido ampliamente condenado a nivel internacional
Y éste es nuestro tercer programa en el que presentamos la serie sobre la vida de Rosa Luxemburgo de radialistas apasionadas y apasionados, Rosa una de las grandes revolucionarias del siglo XX y una de las fundadoras de la corriente de pensamiento del socialismo democrático.
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