Ángel Guerra Cabrera
Cuba celebra el 60 aniversario
 del triunfo de la revolución justo en la culminación de un proceso de 
democracia participativa, muy probablemente sin igual en el mundo. El 
debate popular por cerca de 9 millones de cubanos, desde el 13 de agosto
 hasta noviembre, del texto de la nueva Constitución cubana en 133 mil 
asambleas de base, dio como resultado la inclusión de más de 50 por 
ciento de las propuestas procedentes de esa instancia, generadoras de 
aproximadamente 760 cambios, que implicaron la modificación de cerca de 
60 por ciento de los artículos. Entre quienes formularon propuestas se 
encuentran numerosos de los más de 700 mil ciudadanos cubanos residentes
 en el exterior. El proyecto que dio pie a ese gran proceso, elaborado 
por una representativa comisión de diputados y expertos, presidida por 
el general de ejército Raúl Castro, fue aprobado por la Asamblea 
Nacional del Poder Popular (ANPP) el 22 de julio después de un intenso 
debate donde experimentó importantes modificaciones. En días pasados, de
 nuevo en la ANPP se produjo la discusión del texto con los cambios 
emanados de las asambleas de base, cuidadosamente codificadas y 
consideradas, sin excepción, por la comisión en consulta con expertos 
constitucionalistas y relevantes académicos de distintas disciplinas. El
 documento aprobado será sometido a referendo constitucional el próximo 
24 de febrero, fecha del reinicio de la guerra organizada por José Martí
 para culminar la independencia de Cuba del colonialismo español e 
impedir a tiempoque
Estados Unidos caiga con esa fuerza mássobre las tierras de América.
Para decirlo con palabras del presidente Miguel Díaz-Canel, la nueva 
Constitución reafirma el rumbo socialista de la revolución y nos permite
 encauzar la labor del Estado, el gobierno, las organizaciones y todo el
 pueblo en el perfeccionamiento continuo de la sociedad; refuerza la 
institucionalidad; establece la prevalencia de la carta magna en nuestro
 actuar, una mayor inclusión, justicia e igualdad social y un 
reforzamiento del empoderamiento del pueblo en el gobierno de la nación.
El 60 aniversario es celebrado al calor de este gran baño de masas 
del Partido Comunista, las asambleas del Poder Popular, el gabinete de 
ministros y, particularmente, Díaz-Canel.  Una vez investido presidente 
ha ensanchado considerablemente el consenso nacional e internacional en 
torno a su liderazgo, a lo que ha contribuido un fluido diálogo con el 
pueblo en toda Cuba y en fructíferas misiones en el exterior, incluyendo
 su visita oficial a Venezuela, sus discursos en la Asamblea General de 
la ONU, ante distintas audiencias y ante cubanos residentes, en una 
vertiginosa estancia en Manhattan. Luego, un periplo que incluyó Rusia, 
Corea del Norte, China, Vietnam, Laos, Francia e Inglaterra y, casi 
seguido, la toma de posesión de AMLO en México.  Díaz-Canel ha promovido
 la activa participación en las redes sociales de todos los titulares de
 su gabinete, particularmente en Twitter, para que los ciudadanos 
conozcan diariamente de su actividad. Al mismo tiempo, se produce un 
notable incremento de la televisión digital, así como de la conectividad
 a Internet y telefonía celular, que ya suman millones de usuarios en la
 isla, expresión –afirmó el mandatario en sus palabras ante el pleno de 
la ANPP– 
de la voluntad política de llevar adelante ese programa con nuestros propios esfuerzos y talento, sin espacio para la injerencia que algunos disfrazan en perversas ofertas y planes colonizadores. Obvia referencia a los fallidos intentos del vecino del norte de hegemonizar el uso de Internet en Cuba, como un instrumento de subversión y desestabilización. El mandatario cubano, además, ha instado a los miembros de su gabinete a comparecer en los medios para rendir cuentas ante el pueblo. Se les ve a menudo en la tele y reproducir su estilo de visitas sistemáticas a centros de trabajo y barrios en todas las provincias.
Cuba logró en 2018 un modesto incremento de 1.5 del PIB, no obstante 
las enormes dificultades a que tuvo que enfrentarse. Además del bloqueo 
cada vez más reforzado, que obstaculiza cualquier compra o venta en el 
exterior y que provoca que cuando la isla consiga créditos, deba 
pagarlos con intereses leoninos. Entre esas dificultades, una inclemente
 sequía y los efectos del huracán  Irma en el centro del 
país.  El presidente explicó que el incremento del PIB hizo posible el 
aumento de las pensiones mínimas a los jubilados, que beneficiaron a 300
 mil personas, y de las prestaciones monetarias de la seguridad social a
 99 mil núcleos familiares. En un discurso crítico y muy analítico, 
llamó a una planificación 
movilizadorapara impedir que
la burocracia inmovilice a los principales actores económicos. La sucesión de generaciones revolucionarias está siendo un éxito conducida con pulso firme y claridad de propósitos por Raúl, Díaz-Canel y sus coetáneos.
Twitter: @aguerraguerra
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario