Este texto es la transcripción de la conferencia: Migración forzada y procesos de violencia en contextos fronterizos, impartida en junio de 2018 en la UNAM |
Para Balderrama,
con la esperanza de que el futuro transcurra por días menos aciagos…
La migración en la globalización neoliberal, el migrante como trabajador explotado
Actualmente
los procesos migratorios han tenido un acelerado proceso de
crecimiento, y esto tiene una serie de razones económicas y políticas.
La migración no es un proceso nuevo, es algo que ha caracterizado el
desarrollo de la humanidad, sin embargo desde el siglo XV sobretodo con
los procesos de consolidación y desarrollo del capitalismo hubo una
serie de procesos a los cuales se asoció la migración, desde los
procesos coloniales de invasión colonial europea en Asia, África y
América Latina hasta los procesos de urbanización y de crecimiento de
las grandes capitales. Sin duda algo que movilizó grandes contingentes
de población fue justamente los procesos de industrialización asociados
justamente con el desarrollo del capitalismo y lo que vamos a ver es que
hay una asociación entre capitalismo, Estado Nacional y ciertos
procesos migratorios donde había un fuerte énfasis sobre todo en dos
procesos; uno es de carácter interno, que se dirigían del campo a la
ciudad, en término de la configuración de las metrópolis como lugares de
desarrollo y la otra que tenía que ver con los mercados internacionales
que fueron, digamos esto explicado en términos del modelo clásico del
“push and pull” y articulado con la teoría del Sistema-Mundo de
Wallerstein, sin embargo lo que vamos a encontrar es que a raíz de los
setentas y sobre todo en el cambio de siglo esta se acentuó muchísimo
más. Una cifra que muy ilustrativa es la del 2015 del Banco Mundial en
términos de que hubo doscientos cincuenta millones de migrantes en el
mundo y que además esto se vinculaba con una serie de procesos
específicos. Ahora, hay mucho más migrantes internos en el mundo que los
migrantes internacionales, pero los flujos de migración interna no es
algo que se vamos a tratar en texto, aunque per se son todo un universo
que habría que analizar con mucho más detalle.
Este cambio, esta
aceleración de los procesos migratorios tuvo que ver fundamentalmente
con los procesos de constitución del capitalismo neoliberal y con una
serie de efectos, una cuestión que se observó de manera muy clara fue
que así como en términos de la construcción de los Estados Nacionales a
finales del XIX principios del XX hubo la generación de polos de
desarrollo en términos de procesos desiguales regionalmente, esto empezó
a acentuarse a nivel internacional con los procesos de la globalización
y entonces lo que encontramos es que asociado a la migración se dio un
proceso de deterioro del aparato productivo de los países en vías de
desarrollo y esto se va a articular de manera muy clara con el
surgimiento de cadenas productivas y mercados laborales. El caso más
claro de esto puede ser la migración México- Estados Unidos, uno
encuentra que cuando se dan las reformas neoliberales en México y en
Estados Unidos y entra en vigor el TLC, un cúmulo de personas que
quedaron fuera del aparato productivo, sobre todo en el campo pero
también en la ciudad son los que van a nutrir los contingentes hacia
Estados Unidos, y en este sentido a partir de una lectura que ve al
migrante en su relación con los procesos productivos. Articulaba esto
justamente con los procesos neoliberales por que los migrantes vienen a
ser justamente eso: fuerza de trabajo barata y flexible y que viene a
aceitar estos nuevos procesos de producción. Esto se enmarca sobre todo
en la literatura que tiene que ver con procesos de migración no
documentada.
Los procesos de globalización y neoliberalismo se
dan en términos de flujo de bienes, capitales, dinero, pero con un
proceso muy selectivo de tránsito de personas, y esto es algo que tiene
un papel muy importante porque, finalmente, quienes ponen los candados
para el tránsito de personas son justamente los procesos de integración
regional a nivel de varios países y los Estados Nacionales en
particular.
La migración forzada, una realidad contemporánea
La
migración forzada tiene la pertinencia de que puede articular
justamente los procesos de exclusión y violencia, casi cualquier proceso
de migración forzada incluye esta triada, lo que es pertinente decir es
que de manera contextual esto cambia. Ahora, los flujos de los que voy a
hablar; los procesos de migración centroamericana en tránsito por
México reúnen las tres características en términos de diversas causas
como lo veremos a continuación, y lo que encontramos también es que, si
se fijan, hay también una especie de tendencia similar en términos de
los procesos de migración forzada y de refugio. En 2014 había casi
sesenta millones de personas que experimentaban migración forzada y en
2015 esto subió a casi sesenta y seis millones según datos del ACNUR.
Ahora, aquí también hay un debate muy fuerte porque la migración forzada
y el refugio se aplican preferentemente para procesos en los cuales una
persona tiene que salir de su lugar de origen y tiene que llegar a otro
país, pero también hay toda una vasta zona gris ambigua que hay que
tratar con mucho más detalle y en este sentido los colombianos tienen
una amplia producción que tienen que ver con los procesos de migración
interna forzada, esta es otra línea de discusión muy pertinente, no sólo
en Colombia también en México y en diversos lugares del mundo, pero que
no vamos a tratar aquí.
Haciendo un balance mundial observamos
que de 2.4 millones en el setenta y cinco se subió a 65.3 millones según
datos del ACNUR. La cuestión de la elección de términos no es
accesoria, tiene un papel fundamental, en la medida en que tú eliges
cierto término y eliges generar un andamiaje intelectual que dé cuenta
de él, es en la medida en que puedes hacerlo visible, por eso repito, si
nosotros hablamos de procesos de migración genéricos forzados
tendríamos que incluir también los procesos de migración interna pero no
es el caso, lo que nos permite como verán, será poner el foco en los
procesos de violencia. También lo que se observa es que así como hay un
correlato en términos de los migrantes, de los refugiados, hay también
de acuerdo a iniciativas recientes como el Missing Migrants Project un
incremento en el número de migrantes muertos, aquí sólo me fijo en dos
nodos específicos del total de migrantes muertos a nivel mundial: uno es
el de Centroamericanos y otro el de la frontera México-Estados Unidos
por razones obvias, como lo que trataré será de dar cuenta del proceso
migratorio del triángulo norte de Salvador – Guatemala – Honduras hacia
Estados Unidos y su tránsito por México, lo que interesaba es, por un
lado, identificar los fallecidos en los lugares de origen en el proceso
migratorio, pero también los que fallecen en la frontera México –
Estados Unidos. Aquí también habría que decir que lo que acontece es que
justamente cuando abordamos la frontera no tenemos un dato exacto de
cuantos son centroamericanos y cuantos mexicanos, pero lo que si sabemos
por la literatura es que los migrantes centroamericanos viajan en
condiciones de mucha mayor vulnerabilidad, entonces es mucho más
probable que este número; por ejemplo los 402 muertos en la frontera
tengan un alto porcentaje de migrantes centroamericanos y un menor grado
de mexicanos, esto es algo que también ha detectado la literatura;
entre más vulnerable estés en tus condiciones de tránsito migratorio es
mucho más probable que estés en este tipo de registros.
Particularmente
para el caso de México encontramos que de acuerdo a datos de la SEGOB
el tránsito de migrantes centroamericanos es altísimo, se habla de cerca
de trescientos mil, con una detención de casi doscientos mil y hay un
proceso de deportación de casi ciento cincuenta mil de acuerdo a datos
del 2015. El problema de los datos oficiales es importante y esto es
algo que como investigadores ustedes conocen bien, el uso de ciertas
fuentes limita o posibilita visibilizar ciertas cosas, pero de menos lo
que sabemos es que se trata de un proceso claramente masivo con
dimensiones de crisis humanitaria justamente. La otra cuestión que es
importante decir es que no se trata de un proceso nuevo, había
literatura ya desde mediados-finales de los noventa y a inicios de la
década pasada que apuntaba esto. Lo que acontece también es que hay una
reflexión como veremos más adelante en relación a los procesos de
migración forzada en relación a que cuando uno habla de migración
forzada lo que tiene que tener muy presente son procesos de violencia y
violación de derechos, este es uno de los ejes que voy a enfatizar a lo
largo de la presentación y la otra cuestión es que muchos de los flujos
migratorios empiezan a ser visibles cuando tienen estas dimensiones de
procesos de vulnerabilidad. Como ustedes recordarán hay dos eventos que
pusieron en el escenario la migración centroamericana en tránsito y uno
fue sin duda la masacre de San Fernando del 2010 y la otra fue la de
Cadereyta en 2012, en estas no voy a entrar mucho en detalle, aquí fue
donde el foco de la opinión pública volteó directamente, y puso también
sobre la mesa algo que previamente había venido pasando en México, que
hay un proceso estructural y sistemático de violación de los Derechos
Humanos en específico de este tipo de grupos que como veremos tiene que
ver con su condición migratoria. La otra cuestión es la segunda gran
llamada de atención fue la que tuvo que ver con la crisis de los niños
migrantes no acompañados en 2014 – 2015, dónde según estudios hablamos
de decenas de miles y donde como veremos aquí lo que establezco es una
especie de diada, de dicotomía; por un lado tenemos un proceso de
violencia fáctico, muy claro y un derecho que se viola, por ejemplo en
el caso de la masacre de San Fernando lo que no se respetó fue el
derecho a la vida, en el caso de la crisis de los niños y adolescentes
no acompañados fue el derecho al asilo y al refugio, y como veremos hay
casos menos documentados, hay una organización de migrantes
centroamericanos mutilados. La violencia también tiene una especie de
nivel jerárquico y diferenciado, hay relaciones entre ciertos lugares de
origen, ciertos procesos de tránsito y ciertos procesos de violencia, y
esto lo articularemos con quiénes son los actores que cometen el
delito.
Sobre hay tres grandes fuentes para abordar la migración
centroamericana en México. La primera es el encuadre con datos
institucionales. La segunda tiene que ver con los datos de la REDODEM
que es una Red de Organizaciones Pro-migrantes con más de catorce
albergues y un par de casas y que han venido haciendo un registro más o
menos sistemático desde el 2014; la idea de la REDODEM era justamente
esto, no solamente hacer visible este proceso sino ponerle números, para
justamente tener un proceso de incidencia. El tercer gran registro
tiene que ver con Médicos Sin Fronteras que también más allá de una
especie de retórica generalizada sobre los procesos de violencia
concretizar esto.
Encuadre conceptual, la migración forzada de centroamericanos en México
La
idea de la migración forzada es bastante pertinente porque nos habla de
procesos característicos de la época. En este se remite sobre todo a
dos grandes linderos teóricos. Uno que se hace desde los marcos
jurídicos y el Derecho, es el abordaje de Susan Gzesh que es una abogada
que trabaja en la Universidad de Chicago. Y el otro es de un sociólogo
formado en Economía Política, Stephen Castles. Cada uno de ellos
enfatiza dos procesos diferentes.
En el caso de Susan Gzesh la
idea eje es que el migrante forzado es alguien que sale por que no le
queda de otra y porque lo tiene que hacer forzando su voluntad, el eje
de Susan Gzesh tiene que ver sobre todo con la idea de que este proceso
per se va a generar una violencia sistemática de los Derechos Humanos,
lo que vamos a ver más adelante es que este proceso de violación de los
Derechos Humanos se da de manera específica en el origen en sus lugares
de vida con una serie de rasgos que describiré, en el tránsito y también
en el destino si es que llegan, en uno alude a condiciones de vida, en
otro alude a condiciones de seguridad y en la tercera alude a procesos
de explotación laboral, pero el eje es la violencia.
En el caso
del abordaje de Castles él lo que propone es una sociología de la
migración forzada y lo que va a hacer es justamente articular una serie
de niveles y de escalas en el abordaje de estos procesos, lo que él va a
decir es que a pesar de que encontramos una serie de núcleos comunes a
casi todos los proceso migratorios: aceleración, feminización,
vulnerabilidad, etc. en el caso de estos procesos hay que verlos de
manera muy contextual y en términos de los circuitos migratorios, en
términos del origen, tránsito y destino. Aquí la idea es también jugar
con una idea bastante interesante que es; ya no vamos a detenernos a
procesos de explicación estructural que refieran fundamentalmente a que
todos los procesos migratorios se ocasionan por una causa en específico,
lo que él dice es que, y esto también lo reitera Gezsh es que en los
procesos pueden articularse diversas motivaciones, por ejemplo en el
caso de alguien que perdió la casa por el huracán Mitch y que no tiene
infraestructura productiva el hecho de que no tenga un respaldo
institucional del Estado Nacional donde viva hace que este complejo
escenario desemboque en trayectorias migratorias de amplia
vulnerabilidad, como sería viajar en “La Bestia” y la idea que yo agrego
es justamente que lo que tenemos que hacer es trazar genealogías de
violencias diferenciadas y encadenadas entre sí. Porque lo que acontece
es que una situación de vulnerabilidad puede desembocar en otras, les
pongo un caso específico. El hecho de que alguien salga sin papeles y de
manera apresurada genera que cuando entre en tránsito por México por
ejemplo no tenga todo el capital, en términos de saberes que le permita
elegir la ruta adecuada, y al no elegir una ruta menos vulnerable menos
peligrosa, lo pondrá eventualmente en situaciones de mayor riesgo. En
términos de la literatura clásica esto es una migración forzada no
documentada e irregular o de tránsito, me detendré en lo que les
comentaba, en este esquema pueden ver que hay una relación muy clara
entre ciertos procesos de carencia de derechos sociales vinculado a
ciertas causas, donde lo que se hace aquí es recuperar una lectura desde
la economía política de la migración en términos de vincular las
condiciones materiales de los migrantes en el origen, el tránsito y el
destino y cómo llevan a cabo sus procesos migratorios y como se insertan
en ciertos nichos socio-laborales; tenemos que en el origen encontramos
como determinantes principalmente tres, estás las abordaré con más
detalle para que vean como se distribuyen proporcionalmente; la primera
tiene que ver con lo que en México se conoce como carencias de derechos
sociales, pero que en general tiene que ver con la idea de desarrollo
que remite como a un decálogo, pero en general tiene que ver con empleo,
con acceso a una vida digna, etc. este en términos de las detonantes
económicas. En términos de las detonantes vinculados a procesos
políticos y de violencia la seguridad es fundamental, aquí no me voy a
detener mucho, pero como ustedes saben la región de Centroamérica es una
de las más violentas del mundo y esto además tiene una construcción
social muy específica; en el caso de El Salvador está vinculado a las
maras que se vincularon además al proceso del post-conflicto de la
guerra de El Salvador y a los procesos de deportación forzada en Estados
Unidos, como saben las maras surgieron en Estados Unidos, su génesis
está allá, o el caso por ejemplo de los altos índices de criminalidad en
Honduras.
En el otro está todo lo que tiene que ver con los
impactos de los desastres naturales. La idea del desastre natural es
bastante compleja porque el desastre es un proceso de construcción
social en la medida en que tú no puedes evitar un desastre natural, pero
lo que si puedes elegir es dónde generas un proceso de asentamiento. Si
generas un proceso de asentamiento en una zona de riesgo, qué respuesta
como Estado le das. Entonces todos los desplazados medioambientales de
alguna manera también es una problemática social. La idea de que los
desastres naturales son eso, naturales, es también una idea que hay que
criticar no sólo porque es una ficción sino porque además tiende a una
idea de construcción social. En el tránsito lo que encontramos
fundamentalmente va a ser la ausencia al respeto de los Derechos
Humanos, y aquí la idea es que hay tres grandes linderos para medir eso,
la idea es; no hay de facto posibilidades para pedir derecho a refugio,
la idea de asistencia en la situación del migrante y la cuestión de la
integridad física, es un proceso muy complejo porque estos derechos son
violados por distintos actores en distintos momentos y lo que se observa
más adelante, es que además esto contempla un proceso de
manifestaciones parcialmente selectiva, por ejemplo, los Estados donde
más se violan los derechos de los migrantes son los que están en el sur
del país y son los que tienen que ver no sólo con los lugares de
tránsito y con la composición geográfica de las rutas del tren, sino
también con políticas estatales y migratorias. Hay una coincidencia
entre los municipios con mayor número de agresiones a migrantes y los
municipios dónde se lleva a cabo actualmente el Programa Integral
Frontera Sur, entonces la idea es apuntar hacia una construcción social
de la violencia de los migrantes, porque esto permitiría además un
proceso de incidencia social. Es decir a los migrantes no se les agrede y
se les violan sus derechos de manera igual en todos lados y esto
permitiría tener como políticas mucho más selectivas. Y en el lugar de
destino, los pocos que llegan y que cada vez son menos, hay intensos
procesos de explotación laboral y de exclusión social, esto si es algo
que comparten con los migrantes mexicanos no documentados; aquí si hay
una literatura muy vasta en términos de cómo les pagan menos, no tienen
derecho a seguridad social cabal, pueden ser discriminados y socialmente
están excluidos no sólo en términos laborales sino en términos sociales
por su condición migratoria, la idea entonces es generar una
articulación.
El papel del Estado-nación en los procesos de migración forzada
Ahora,
la otra cuestión que es fundamental es que de alguna manera se va a
tratar de manera un poco más marginal en la presentación es la idea de
que ¿cuál es el papel que los Estados juegan en esto? Sí hay fuertes
indicios de que la política migratoria mexicana tiene una clara
influencia determinada por los intereses de Norteamérica más allá de lo
que se dice y los debates, se observa que por ejemplo el Programa
Integral Frontera Sur fue una respuesta clara a la crisis de los niños
migrantes no acompañados en la frontera México-EU. Entonces cuando se ve
estas coyunturas y se establece las conexiones, resulta más o menos
clara sobre todo porque en términos de política migratoria y de la
práctica política de la política migratoria ya en los lugares
específicos lo que se observa es que lo que menos está presente es el
interés de la seguridad humana. Lo que priva justamente es más bien un
enfoque de seguridad nacional y de criminalización del migrante, que es
por ejemplo tal cual lo que está haciendo la actual administración
Norteamericana. En el migrante, en lugar de alguien que tiene que salir
para tener una mejor vida, para conservar la vida, para reunificarse, el
gobierno de EU lo ve como un criminal y esto si es una elección que
hacen los Estados y hay un proceso de construcción ideológica clara. De
manera que un eje fuerte es pensar que no hay el eje de la seguridad
humana, no está de facto en la política migratoria, de hecho una
cuestión de fondo es ver que cuando se analizan los procesos de política
migratoria ser tendría que ver que hay un desfase, o que no
necesariamente hay una relación lineal entre las políticas, los
discursos, los marcos jurídicos y lo que de facto pasa, que esto es una
lectura que tampoco es nueva, cuando uno hace análisis político del
Estado en un país como éste uno eso es lo que encuentra. De hecho lo que
se observa es que más bien estos procesos de disociación son
característicos de la política en general, pero en el caso de la
política migratoria tiene matices bastante específicos. La historia de
esta migración tiene más de una década, inició desde los noventas y lo
que si se observa es que es un flujo fundamentalmente masculino todavía.
Lo que se destaca también es que los procesos de repatriación se han
incrementado y esto es bastante interesante porque conforme observamos
que hay un proceso de acentuación de las condiciones adversas en
Centroamérica, de incremento de los flujos migratorios y de incremento
de la presión norteamericana, el número de deportados y repatriados
también empieza a incrementarse, esto es un indicador indirecto de
procesos de violencia que pueden sufrir los migrantes.
Migración forzada y procesos de violencia hacia los centroamericanos en México
Ahora
bien, de acuerdo a la SEGOB, se estimó en trescientos mil más o menos
por año. En la REDODEM según el informe del 2015, se registró un poco
más de treinta mil. Ahora aquí si hay una acotación que hacer y esto si
lo menciona el estudio de la REDODEM. En el caso de la REDODEM lo que
acontece es que los albergues están preferentemente en las “rutas
clásicas” y entonces lo que estos estudios dicen es: “nosotros sólo
tenemos una visión muy parcial y selectiva del proceso, este proceso es
mucho más grande, pero nosotros sólo vamos a dar cuenta de lo que
podemos registrar”; y la elección de ubicar estos sitios, estos lugares
de apoyo a los migrantes se daba justamente en relación a las rutas.
También ha habido un proceso de cambio de las rutas y junto con un
proceso aconteció un proceso de mayor violencia y vulnerabilidad. Y si
un proceso de mayor violencia no es visibilizado no va a aparecer
registrado en la literatura, y entonces esta es una fuerte llamada de
atención que hacen las ONG’s. El menaje es “en la medida en que ustedes
(el gobierno) vuelven más invisibles a los migrantes a raíz de ciertas
políticas migratorias, por ejemplo que no se suban al tren de carga, los
van a exponer todavía a mayor violencia”. Esto es algo que se ha visto
también en los estudios sobre política, en la medida en que hay un
proceso de impunidad generalizado esto fomenta que los procesos de
violación de los Derechos Humanos se incrementen.
La otra
cuestión que es muy clara es, los dos países con más participación en
términos del aporte de migrantes son Honduras y el Salvador y esto
coincide con la articulación en término de los índices de criminalidad;
en Honduras en términos de crimen organizado y de violencia generalizada
y en el Salvador en el caso de las maras, en el caso de Guatemala hay
un menor registro pero también hay situaciones de post-conflicto y de
incremento del crimen organizado. Hay un componente social específico,
el mayor número de migrantes coincide más o menos con la edad laboral,
hombres entre 18 y 30 años más o menos el 70% y de hombres de 31 a 40
años con el 25%, los dos polos que menos tienen son los menores de 11 a
17 años y los de 45 a 50 años; la mayoría de los migrantes son solteros y
después están los de unión libre y casados, y finalmente la mayoría de
los centroamericanos todavía hasta antes del Programa Integral Frontera
Sur, intentaba llegar a Estados Unidos. México sólo era un lugar de
tránsito. Los registros de la REDODEM señalan que la mayor cantidad de
centroamericanos salía sobre todo por razones económicas. Aquí hay una
discusión de cómo considerar una causa económica como un proceso de
migración forzada, pero cuando tú tienes procesos crónicos de desempleo y
salarios como los que existen en la región o en México, esto tiene que
ser considerado como un proceso de migración forzada.
La otra
cuestión son los factores medio ambientales, con los procesos de
construcción social del desastre y finalmente la violencia. Ahora, esto
discrepa por ejemplo con lo que dice Médicos sin Fronteras, según
Médicos sin Fronteras la violencia es la principal causante, pero, aquí
también hay que ver que hay un proceso de selectividad en el registro.
Por ejemplo, Médicos sin Fronteras se dedica sobre todo a tratar a
migrantes agredidos, mutilados, etc. Hay una necesidad estructural de
muchísimo más estudios de esto. Lo que sí se encontró es que hay una
relación entre los municipios y los departamentos de origen y los
índices de violencia, cuando uno bajaba por ejemplo, este mapa lo que
muestra son los municipios o departamentos que más expulsan dependiendo
del país y en el caso de Honduras y de El Salvador, sí había una
coincidencia entre los que más expulsaban, o una coincidencia
considerable entre los que más expulsaban y los que tenían altos índices
de criminalidad o de violencia de algún tipo. La otra cuestión es que
hay un proceso de selectividad social, los grupos sociodemográficos con
condiciones socio-económicas más precarias generalmente son los
migrantes forzados, es difícil que un migrante con cierta posición
económica sea un migrante forzado, y esto tiene que ver con una lectura
de economía política de la migración, donde tu observas que hay una
relación entre las condiciones materiales de vida, el nivel de
desarrollo y los procesos migratorios. En esto hay una lectura mucho más
abundante, están los textos de Castles o de Delgado y Márquez. Y lo que
si se observaba también es que si participaban en los procesos
migratorios mujeres y niños y adolescentes, pero en mucho menor medida,
pero, no obstante, ellos están expuestos a procesos de violencia mucho
más agudos. Entonces, hay un proceso selectivo de violencia en función
del tipo de migrante, en el caso de las mujeres y de los niños se sabe
que están mucho más expuestos a agresiones sexuales, a trata de
personas, etc.
Cuando se habla de retorno asistido o deportación
habría que hablar también de procesos de migración forzada de retorno,
cuando tú haces que forzosamente regrese alguien a un sitio donde estaba
amenazado o donde no tiene nada, aquí hay que hacer justo una lectura
política no sólo en términos de derechos y de posición de documentos
migratorios. La otra cuestión es que hay mucho más víctimas de violencia
que son hombres, pero esto también tiene una razón de ser porque es el
grupo mucho más numeroso, si se fijan uno de los grupos más afectado
incluye ya la edad de 15 años y más. La nacionalidad de las víctimas
también coincide un poco con la participación de migrantes según país,
es decir, hay más hondureños víctimas porque había más hondureños, hay
más salvadoreños que guatemaltecos porque había más salvadoreños y en
tercer lugar estaba Guatemala. Aquí un eje específico tendrían que ser
los procesos selectivos de violencia hacia niños y hacia mujeres, sobre
todo en términos de procesos de tráfico de personas o de abuso sexual.
Entonces si se fijan, se recupera la idea de Castles de hacer una
lectura mucho más contextual y diferenciada, pero sin perder los
procesos de articulación con los procesos de mayor escala. De acuerdo a
los crímenes o a los delitos que se cometían, el robo y la extorsión
eran los más frecuentes y esto se iba corriendo de manera que los menos
numerosos eran la violación sexual y el tráfico de personas y el
soborno. Pero esto también cambia en relación a las fuentes, si nosotros
tomamos los informes de Médicos Sin Fronteras esto cambiaría o si
tomamos por ejemplo los informes que han hecho algunos académicos con
respaldo de la ONU o de ACNUR, encontramos por ejemplo que los grupos trans o ciertas mujeres tienen claros procesos de violación sexual, de agresión sexual, de trata de personas.
Las manifestaciones espaciales de la violencia y los sujetos involucrados
La
otra cuestión que interesa resaltar es cómo se manifestaba
espacialmente esto, porque esto también remite a hacer vinculaciones con
procesos específicos. Por ejemplo ver dónde actúan los grupos
delictivos, ver dónde las autoridades están más coludidas con
particulares y con grupos delictivos y ver dónde son más vulnerables los
migrantes. Entonces lo que se encuentra es que Chiapas es el estado,
por mucho, en donde más derechos se violan a los migrantes, luego estaba
Veracruz, finalmente Oaxaca y Tabasco, el caso de Tabasco es
interesante porque acuérdense que también ahí está la 72 y ahí también
se sabe que los procesos de violencia son agudísimos, pero esto también
tiene que ver con qué tanto podemos hacer visibles los procesos de
violencia. El Programa Integral Frontera Sur entró en vigencia en 2014 y
coincide con los lugares donde más se violan los derechos de los
migrantes por lo menos en Chiapas, entonces, aquí hay un proceso de
articulación entre violencia, papel del Estado y libre accionar de los
grupos de delincuencia organizada.
Ahora otra cuestión que era
muy interesante era ver quiénes eran los agresores, porque esto también
es fundamental, cuando tú hablas de un proceso de violencia, hablar de
manera generalizada no resuelve para nada las cosas. Decir que hay un
proceso de violencia de migrantes y decir que todo México es un
cementerio sin duda es útil, pero lo que necesitamos saber es dónde se
dan éstos procesos, porque los grupos delictivos y los delitos se
cometen siempre en lugares específicos, a pesar de que haya procesos
generalizados de violaciones de Derechos Humanos, estos procesos
acontecen siempre sitios específicos y esto permitiría eventualmente
tener otro tipo de accionar político. Y en cuanto a los sujetos, algo
que se encontró que es bastante sorprendente, pero bastante esperado
también es que las autoridades son uno de los principales
“delincuentes”, son de los principales agresores, después el crimen
organizado y después los particulares. Dentro de las autoridades hay un
proceso diferenciado, observamos por ejemplo que curiosamente la policía
Federal era el que tiene la participación más importante, después la
Municipal y después la Estatal, nuevamente esto de acuerdo los registros
que se tienen, y después lo que se hacía era un registro de la relación
entre el autor del crimen y el crimen en cuestión. Y lo más constante
es la idea de obtención del migrante como alguien del que se puede
obtener dinero fácil y en última instancia tenemos como delitos que
implican agresiones físicas fuertes que están bastante presentes en
todos los grupos.
Hay una articulación entre el espacio
fronterizo, la ausencia de derechos y la comisión de delitos pero desde
una serie de procesos de contextualización mucho más elaborados. La idea
justamente de como la violencia y el crimen tiene una manifestación
territorial muy muy acotada, de hecho sería por ejemplo ideal poder
luego bajar en específico a donde acontecen esto en los municipios. La
idea de pensar que las políticas puedan expresarse de manera
generalizada a nivel nacional es una ficción, un poco lo que refleja el
mapa en términos de procesos de violencia, la violencia se concentra
sobre todo ahí. Con esto no quiere decir que no se violen los derechos
del migrante en Tuxtla Gutiérrez o en algunos de los municipios de la
costa pacífico de Chiapas, lo que quiere decir es que fundamentalmente
se concentran aquí, y que aquí es donde habría que tener una lectura
mucho más detallada.
También hay un proceso histórico de las
rutas y también cambian. Antes, el escenario de la violación de los
derechos de los migrantes tenía antes más o menos esta radiografía que
coincidía con la ruta del tren y con los albergues. No obstante, a raíz
de que se da el Programa Integral Frontera Sur esta radiografía cambia y
tenemos que re-hacerla. Ahora bien, por ejemplo también hay nodos
ciegos que habría que abordar con mucha más fortaleza, sin duda Tabasco
es uno, porque Tabasco se sabe por los registros de la 72 que los
niveles de violencia son altísimos, entonces ahí sabemos que hay un
montón de procesos que no estamos viendo, que no estamos viendo no sólo
porque no podamos, sino porque no hay infraestructura, no hay ONG’S,
porque es un riesgo también indagar esto; esto es algo que no se dice, y
esto remite también en otro orden al papel del Estado en términos de la
ordenación y la garantía de la integridad de la vida no sólo de los
migrantes, si no de quienes indagan esto.
Los procesos de construcción social de la violencia hacia los centroamericanos
En
fin, cierro diciendo tres ejes fundamentales. El primero es la
construcción de espacios de violencia, la idea más bien esto, de que los
procesos de violencia tienen que analizarse en términos de espacios de
violencia, pero también de actores y de procesos de relaciones
desiguales. Con la idea justamente de que la ausencia de derechos, es
una constante pero que hay que analizarla de manera específica en el
origen y en el tránsito. Por ejemplo, la falta de protección es algo
fundamental, este tipo de documentos (el informe de la REDODEM) lo que
muestran de facto es que los Derechos Humanos son letra muerta, o que en
buena medida son letra muerta, y aquí si hay un desglose, por ejemplo,
en caso del tránsito por México no tienen derecho a la integridad
física, ni al asilo, ni al refugio. La violencia tiene un doble proceso
de construcción social; sin duda una tiene que ver con el accionar de
los grupos delictivos, pero la otra tiene que ver con que la ley no se
cumple y con que la impunidad reproduce este círculo de la violencia. Y
esto en el nivel donde el Estado no hace cumplir la ley en general.
Pero
hay otro nivel que tendría que reconocerse y es la lectura del migrante
como transgresor de la ley, y este es un nivel suplementario de
violencia, sobre todo porque de lo que se trata son sobre todo de
migrantes forzados, cuanto tú tienes migrantes forzados y tú generas un
proceso de lectura de transgresores de la ley lo que haces es reproducir
un estigma. Un estigma es atribuirle a un sujeto social una serie de
valores que no tiene per se y que le son atribuidos deliberada y
políticamente. Y aquí justamente habría una cuestión bastante
interesante porque por ejemplo en el Programa Integral Frontera Sur,
aparentemente el eje es la seguridad humana, pero de facto lo que
acontece es una lectura de seguridad nacional, mucho en términos de que
todo aquel que entre a un territorio nacional sin documentación
migratoria está transgrediendo algún proceso de soberanía y tiene que
ser tratado como un delincuente y de facto esto si tiene en común una
serie de rasgos con lo que acontece con los mexicanos en Estados Unidos
actualmente.
Y la otra cuestión es ver como éste doble
escenario: el que se criminalice de facto a los migrantes y el que no se
ejerza la ley permite la libre operación de los grupos delictivos, que
esto es algo que también se ha estudiado, bueno, con todos los asegunes,
pero que de facto termina pasando. La convivencia, a veces la
colaboración entre autoridades y grupos delictivos, pero es algo que
también tiene que pensarse sin duda. Y bueno una lectura mucho más en
términos estatales de una reflexión del Estado tendría que ver con que,
hay una aproximación de cómo hay un Estado fallido sobre todo en
términos de que no garantiza los procesos que permitan que se lleve a
cabo una vida social de acuerdo a ciertas normas.
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