(Archivo)
El poeta Javier Sicilia llegó este lunes a Washington al frente de la Caravana por la Paz con la que durante un mes recorrió 25 ciudades de Estados Unidos con el reclamo de poner fin a la violencia en México.
Sicilia y su comitiva se instalaron en una iglesia local, donde pernoctarán durante los tres días ue estarán en la capital estadounidense, última parada de este periplo.
Según declaró el activista a su llegada aquí, la idea es colocar en la agenda política nacional, en plena campaña electoral, “la temática de la paz y el conflicto de la violencia que ha generado en México la guerra contra las drogas”.
Un proceso, según Sicilia, en el que Estados Unidos juega parte importante por ser el principal consumidor de narcóticos del mundo, por la venta indiscriminada de armas y el lavado de dinero.
La Caravana por la Paz salió el 12 de agosto último de la ciudad fronteriza de Tijuana (México) y en esta capital tiene previstas varias actividades, entre ellas audiencias con congresistas y funcionarios del Departamento de Estado.
Los caravanistas se reúnieron este lunes con miembros de la central sindical AFL-CIO para discutir el impacto del Tratado de Libre Comercio y la Iniciativa Mérida en la vida de los trabajadores mexicanos.
Para mañana está programada una rueda de prensa en la que participarán integrantes de la Oficina en Washington sobre Latinoamérica.
Hemos viajado a través de Estados Unidos para crear conciencia sobre el insoportable dolor y pérdidas causados por la guerra de las drogas y de la enorme responsabilidad compartida por proteger familias y comunidades en ambos países, expresó Sicilia, cuyo hijo fue asesinado por el crimen organizado en 2011.
De acuerdo con cifras ofrecidas por el propio activista, en México han perdido la vida más de 70 mil personas en los últimos seis años, a causa de la violencia.
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