El poderoso gremio docente de Argentina cumplía este martes una "contundente" huelga nacional, la primera en la era de los Kirchner desde el 2003 por reclamos salariales, lo que afecta el inicio del año lectivo, luego de fracasar negociaciones con el gobierno.
La presidenta argentina Cristina Fernández
"La huelga nacional es contundente. Tiene una adhesión de 95 por ciento de los docentes en la mayoría de los distritos", dijo Stella Maldonado, titular del sindicato de educadores, una de las organizaciones laborales aliada del gobierno, que nuclea a unos 450 mil docentes del sector público.
La matrícula estudiantil en Argentina, sin contar el nivel universitario, incluye a unos 10 millones de niños y adolescentes en los sistemas público y privado.
El paro, que afecta el inicio del ciclo lectivo tras el receso del verano austral, fue decidido luego de que el gobierno fijara "unilateralmente" un salario mínimo de US$643, mientras los educadores exigían US$690, denunció este martes Maldonado en una rueda de prensa.
La protesta se realiza en medio del malestar del sector ante recientes declaraciones de la mandataria Cristina Fernández viuda de Kirchner quien, al fustigar las advertencias de huelga, dijo que los educadores "tienen tres meses de vacaciones y trabajan cuatro horas por día".
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, señaló este martes que el gobierno "no merecía que frente a algún inconveniente se llegara a este paro", el primero desde el inicio del mandato en 2003 del fallecido expresidente Néstor Kirchner, quien fue sucedido en 2007 por su esposa, Cristina Fernández, reelecta en 2011 hasta 2015.
Tomada destacó "la defensa de la escuela pública que ha hecho el gobierno nacional", al aludir al aumento del presupuesto educativo en los últimos años, llevándolo al 6.4 por ciento del Producto Interno Bruto argentino.
La matrícula estudiantil en Argentina, sin contar el nivel universitario, incluye a unos 10 millones de niños y adolescentes en los sistemas público y privado.
El paro, que afecta el inicio del ciclo lectivo tras el receso del verano austral, fue decidido luego de que el gobierno fijara "unilateralmente" un salario mínimo de US$643, mientras los educadores exigían US$690, denunció este martes Maldonado en una rueda de prensa.
La protesta se realiza en medio del malestar del sector ante recientes declaraciones de la mandataria Cristina Fernández viuda de Kirchner quien, al fustigar las advertencias de huelga, dijo que los educadores "tienen tres meses de vacaciones y trabajan cuatro horas por día".
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, señaló este martes que el gobierno "no merecía que frente a algún inconveniente se llegara a este paro", el primero desde el inicio del mandato en 2003 del fallecido expresidente Néstor Kirchner, quien fue sucedido en 2007 por su esposa, Cristina Fernández, reelecta en 2011 hasta 2015.
Tomada destacó "la defensa de la escuela pública que ha hecho el gobierno nacional", al aludir al aumento del presupuesto educativo en los últimos años, llevándolo al 6.4 por ciento del Producto Interno Bruto argentino.
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